martes, 28 de julio de 2009

De Mcgregor y mis cosas.

Soy un tanto fetichista y ayer guardé todos los mensajes de correo que me ha enviado Mcgregor en una carpeta especial y protegida.

Tengo impreso todo lo que he leído de Billy pero esto de sus mensajes privados es una especie de rito. Es como si quisiera contener a este personaje tan misterioso y amable y que me ha proporcionado tantas emociones en lo poco que me ha escrito en exclusiva.
Por mi parte podría escribirle todos los días de mi vida para contarle cualquier cosa. Para contarle por ejemplo que los gatitos de mi gata ya salen de su caja e intentan subirse por mis piernas mientras escribo esto y seguramente con la “obscura” intención de que los acaricie.

Es una cursilada, no se lo diré.

O para decirle que hace mucho calor hoy en Zamora pero que me siento afortunada por vivir en el campo y poder disfrutar de una piscina de agua fresca y de toda la sombra de un nogal a la hora de la siesta y por no tener que preocuparme por si llego a o no a fin de mes como le pasa a Gío (le mando un beso grande y mi ayuda cuando la necesite).

Para decirle que quiero una camiseta de Alberto porque me gustan mucho pero que no se la pediré porque no sé cómo se habla con el marido de Dios.

Para decirle que hasta el viernes tengo vacaciones y descansaré de Alfonsito y de Vicente aunque en el fondo los extrañe.

Para decirle que fantaseo pensando que los personajes femeninos de sus historias se llaman Amparo como yo.

Y es que a mí Bílly me inquieta y me emociona como muy poca gente pero que sin embargo siento pudor pero ganas de hablarle de las cosas que nunca hablaría con nadie.

Dice mi jefe el doctor Franco que no me coma el coco, que todo es normalísimo y que los sentimientos hay que dejarlos en paz, a su bola.

No sé si llamándose Franco debo hacerle caso. No sé si hacerle caso a un psiquíatra que se lleva de excursión por los montes de Sanabria a un montón de locos sin sopesar consecuencias.

En fin.....

12 comentarios:

Ana Clavero dijo...

Quiero decirle a Macgregor lo que tú le dices y, además, añadirle que hoy - hace apenas cuatro horas - ha hecho treinta y tres años que fui madre por primera vez. Decírtelo a ti y a él, decírselo a todas la personas sensibles de este mundo virtual y apostar porque Billy, pese a su hermetismo, es alguien capaz de escuchar. Será por eso que lo estimo tanto.

Yo no soy rencorosa, pero amén de no saber hablar con Dios, y amén de que Dios puso en duda que yo sintiera la muerte de mi padre, no quiero lucir la camiseta neorrabiosa - tampoco creo que hayan hecho ejemplares de mi tamaño-. Quizás por Alberto sí, aunque jamás le perdone el daño que le hizo a un sitio en el que yo había puesto todas mis ilusiones (eran otros tiempos y otras circunstancias), pero por Dios, nunca...Jamás.

Es lo que hay, cojones tenemos todos y ovarios...pa que te cuento, incluso aunque hablemos de la regla y de todo los que se nos pase por el arco del triunfo de nuestros estrógenos.

Besazos y abrazazos, Amparo, y mis disculpas por usar tu tribuna para desahogarme, pero es que a mi no me lee nadie o casi nadie.

Ana Clavero dijo...

Y que conste que no hace mucho dije, pelillos a la mar, pero es que las cosas que no se solucionan, siguen ahí escociendo por mucho que una intente hacer de tripas corazón y a otra cosa mariposa.

En fin, que no es un buen día - creo que se nota - y cuando los días no pintan bien, la mala leche se enerva.

Más besos. Me voy ya para no tener mucho de lo que arrepentirme dentro de un rato.

VICTOR VERGARA dijo...

No estuve muy fino para reflejarlo en mi blog pero si, sólo conozco a BILLY por las cosas que escribe Y pienso también que detrás debe esconderse una gran persona, un gran tipo.

ANITA, sí se te lee. Un beso y felicidades por ese lindo aniversario.

Bletisa dijo...

Felicidades a tu niño Ana y a tí y a Billy.

Oye que Batania no es Dios, que sólo es su marido....
No te enfades Ana, anda que se alteran los estrógenos y pá que te cuento.
Puedes usar esto cuando quieras ya lo sabes pero yo si te leo.

¡Qué vida esta para ser eterna!

Muchos besos.

Bletisa dijo...

Tipa......que es una señora ejejeje.

Besos gato.

víctor (el gato estepario) dijo...

¡¡BATANIA!!, quién o qué cosa es??, jojo

Me dan miedo los dioses terrenos. Al final todos acabaron desvariando o haciéndo alguna trastada. ASÍ HABLÓ ZARATRUSTA


SALUDOS DESDE LA TABERNA.

Petri dijo...

Me tienes enganchada el tema neobarroso, dios y Ana, de billy, pues mira, mientras escriba, por lo menos podemos leerle, tiene algo especial.

Bletisa dijo...

Kafka: Batania es Alberto Basterrenechea y no es marido de Dios ni nada de eso pero a él le gusta decirlo y hay que dejarle porque disfruta con esas cosas.
Que yo esté triste con él no quiere decir que no me guste.
Es más yo nunca estoy triste con quien no me importa nada.

Todos los dioses me la rempanflinflan menos los míos.

Bletisa dijo...

Que el neorrabioso es una gran persona no lo dudes A y lo de que esté casado con Dios pues yo qué sé... serán cosas suyas sin más, bah.
Ana es Ana y hay que escucharla muy callados cuando habla.

Billy es una emoción pura para mí incluídos sus defectos cuando escribe (que conste que los tiene)y que lo sea para mucha más gente casi hasta me molesta.
Lo quería en exclusiva, ya ves.

Ana Clavero dijo...

Hay que compartir, Bletisa, hay que compartir, y como Billy, pese a su misterio, se me antoja inmenso, pues compartmoslo, si al muchacho no le molesta y nos lo permite.

Jopé, niña! eso de que Ana es Ana y hay que escucharla muy callados me ha sonado casi a ancianidad, jajajaja. A que va a ser que me estoy haciendo madura?

Bletisa dijo...

Que no mujer.......
Si yo soy más mayor que tú.
Lo decía por sabia, por sabia mujer que eres.
¿Estás en crísis existencial profunda como yo?

Un beso.

Genética Inexacta dijo...

Ni crisis profundas de existencialidad ni porras! A ver si las dos mujeres con mas salero y cojones ( femeninos pero cojones) del todo el mundo web y parte del extranjero se me van a poner ahora a hacer un pulso de edades y de estrógenos, que no que no, 4 cervezas cada una y se pasa todo, por cierto... ese día espero estar presente y Billy... lo mismo nos mira sentado en una mesa desde un rinón del café, total, como nadie sabe cómo es...que misterio no?