viernes, 14 de agosto de 2009

Segundo izda de Billy

Soy consciente de que machaco este relato poético de McGregor leyéndolo en voz alta .
Lo suyo (lo que me encantaría) es que él hiciera las otras voces y yo exclusivamente la de la mujer que llama a la puerta. Aún así y con el morrote que me caracteriza, lo subo para demostrarle mi absoluta admiración y cariño y para volver a darle las gracias por todos los momentos de emoción que me sigue regalando cada vez que escribe.




SEGUNDO IZDA


Veintiséis años sin verle, sin escribirle una carta, sin hacerle una llamada, sin existir, y ahora, estoy llamando al timbre de su casa:

-Ding-dong.

-¿Sí? ¿En qué puedo ayudarla?

Está guapísimo. Alto y fuerte, hermoso. No me ha reconocido. Pero es él, de eso, estoy segura.

-Usted dirá.

No soy capaz de decir nada. Y en cambio podría contarle tantas cosas, podría contarle, todas las cosas …

-¿Se ha equivocado? Oiga, no hace usted buena cara, ¿se encuentra mal?

Sí, me encuentro mal. Ahora mismo soy la mujer más feliz del mundo. Pero me encuentro tan mal que me tiemblan las manos y me faltan las fuerzas, y este sudor, y esta fatiga …
Jamás hubiera imaginado que sería tan guapo y tan amable, y tan, dios mío, le abrazaría, le abrazaría y le besaría y lo apretaría contra mi pecho. Contra mi pecho.

-Oiga, diga algo, mire yo, tengo cosas que hacer, en fin, trabajo y esas cosas, ya sabe, me estaba preparando para salir.

Trabajará de algo importante, seguro. Esa corbata es cara, muy bonita, y qué bien lleva las rayas de los pantalones.

“-Julio, ¿quién es? ¿Qué haces en la puerta tanto rato? Que llegas tarde, luego no te vayas enfadado porque llegas tarde”

-Lo siento, mire, pero tengo que dejarla, ya ve, es que tengo que irme a, oiga, si se ha equivocado de puerta, no pasa nada, en fin, cierro, sabe, sí, cierro, hasta luego entonces … ¡Splam!

No, Julio, no me he equivocado. Es la única vez en mi vida que no me he equivocado.

3 comentarios:

Jose Zúñiga dijo...

Ejem... ¿Recuerdas lo del triquitraca?

Bletisa dijo...

Claro.

Bismark Estrada dijo...

Vaya Bleti... me has emocionado con tu lectura.

Encima que Billy escribe que no te la crees...

Me ha gustado mucho.

Abrazos.