Pintura de Olga Minardo
Ahora es solamente la hora del silencio,
de recogerse adentro y llorar hacia adentro
aunque nos crezcan flechas de suicidio.
No ir dejando huella es la consigna.
Sólo encerrar demonios
poniéndoles cadenas y candados
desde dentro
Y alguna vez que otra
respirar hacia adentro
para que llegue el aire a todos los rincones,
no sea que asfixiemos por olvido
al ángel camuflado que aún nos queda.
Bletisa.
6 comentarios:
Habrá que usurparse
S
a
l
v
a
r
a nuestro héroe.
Menos mal que tenemos ángel y lo mejor de todo que nos hacemos conscientes que lo tenemos.Me han gustdo estos versos del adentro. La existencia toma forma con ello.
Un abrazo amiga. Tino
Y menos mal que aún nos queda ese ángel
camuflado...
Buen poema, Bleti. Abrazo.
Hola Bleti!!!
TÚ,tienes ángel,ciertas personas tienen ese don,ese carisma y tú lo tienes.
Es hora de cerrar bajo llave ese dolor y de continúar de la mejor forma,saliendo desde dentro tanta ternura.
Un inmenso abrazo,gracias por venir a verme,cariño
Precioso, Belti, precioso.
Besos.
Respirar profundamente, y después darle una patada en los mismísimos huevos a los demonios, es lo que haría un gato como yo. Que se le frian sus partes en sus propias llamas, jeje. Me gustó el poema.
Besos.
miau.
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