viernes, 11 de mayo de 2012

De mi soledad y de un poeta Mexicano

Poco a poco todo va recobrando la normalidad y colocándose y ocupando los huecos que cualquier crísis se encarga de repartir por todas partes.
 La verdad es que un cambio casi de repente siempre es un hijo de puta al que hay que saber cogerle las vueltas y manejarlo para que no se te suba a la chepa y te haga fosfatina con sus uñas largas y asquerosamente negras.
Para alguien que como yo no ha vivido nunca sola porque ya nacio en una familia numerosa y siempre ha vivido rodeada de mucha gente y de muchos animales "de muchas personas", no es fácil adaptarse a tanto silencio y a hablar conmigo misma y con nadie más al llegar a casa.
  Por otro lado tengo que reconocer que le empiezo a tomar el gusto a la soledad y a esta otra forma de vivir.
  Mi carácter melodramático sale a escena en cuanto me da la gana y lloro como un tonto también cuando me da la gana.
   Si no no quiero no estoy sola nunca.
  En fin......todo suele arregalarse con una llamada de tfo espe-inispe...rada o un mensaje de texto que me dice: El viernes voy a verte.


.............y hablando de soledades,

con el cambio de casa y al colocar mis libros, me he reencontrado con uno heredado de mis abuelos y de edición de 1902 que se titula Tesoro poético del siglo XIX.  Es un libro muy bonito encuadernado en piel y con el canto dorado. Lo forré con plástico para que no se deteriorara más.

 La recopilación de autores corre a cargo de un Jesuita que se llama Vicente Gómez Bravo.
Hay poemas de poetas  de España, Cuba,  Méjico, Guatemala, Venezuela, Perú y República Argentina.
 Es un libro que guardo con muchísimo cariño.  Hojeándolo me he encontardo con papel de hacer cigarrillos señalando alguna página y con flores secas señalando otras.
 ¿Lo ha leído una mujer y también un hombre?
 Son conclusiones mías un poco simplistas. Lo que es cierto es que ha sido léído por mi gente
y tenerlo ahora yo me emociona.

Cuelgo estos versos (que vienen muy al caso) de "Profecía de Guatimoc" poema del poeta romántico Mexicano,  Ignacio Rguez Galván

 

....
¡Oh soledad, mi bien, yo te saludo!
¡Cómo se eleva el corazón del triste
cuando en tu seno bienhechor su llanto
consigue derramar! Huyendo el mundo
me acojo a tí. Recíbeme, y piadosa
divierte mi dolor, templa mi pena,
alza mi corazón a lo infinito...

7 comentarios:

Bletisa dijo...

Que así sea.

Besos a todos lo que aún quedáis

estrella dijo...

Hola mi querida Bleti!!

Gracias por el saludito en el blog de Víctor,jaja.

Recomponer,apilar,distribuir,repartir...y acostumbrarse a la soledad,mmm!!mucho trabajo cariño,ves aclimatándote poco a poco,no tengas prisa,lo bueno es que cuando quieras te puedes sentar y descansar,tú tienes el mando de la tele y cuando quieras llorar o reirte de tí misma no te tienes que esconder,hay cosas buenas,eh...!!!

Escucha el silencio,dentro de ti te habla,parece una tontería,pero puedes escuchar tus pensamientos,esos a los que no le dejabas paso por falta de tiempo o ganas,ahora puedes oírlos.
Maravillosa poesía,nos has dejado de ese autor,me ha gustado mucho,como habla de la soledad como compañera.

Un beso para ti cariño,yo sigo aquí,jaja!!!

VICTOR VERGARA dijo...

Gracias a ti, Bleti, por seguir con nosotros contándonos cosas, tus cosas.

Dale recuerdos a tus palomas de mi parte, y diles que hay un gato que si las pillara ... :)

Un beso.

Unknown dijo...

Las hebras que quedaron sin fumar y una flor marchita y un libro deshojado...

Tus ancestros sabían de un poema en soledad, como templa la pena, como alza el corazón al infinito. Sabían otra forma de vivir más allá de la herencia.

Qué suerte el hallazgo de un tesoro, Ble.

Un abrazo

Bletisa dijo...

Alguna ventajilla hay Estrella, pero de momento siento más las desventajas.
No va conmigo la soledad porque me resulta muy desconocida.
Me adaptaré y estaré bien sobre todo porque me voy a empeñar en ello.
Ahora confieso que me duele.

Gracias por tu compañía siempre.

Bletisa dijo...

Deja las palomas coña, pobrecitasss.
Ponen sus huevitos (ya dos)y cumplen su misión.
Mira, cuendo te enseñe los pollitos te van a enternercer tanto que dejarás de ser un gato cabroncete.........ya verás.
Eres un amor fanfarrón que no matas una mosca y se lo voy a decir.

Bletisa dijo...

Hola Manuel.
Hay libros muy bonitos y a mí este me gusta.
Gracias Barcia por venir.